Poseo un insomnio de esos que son difíciles de deshacer. De los que cuesta salir, de esos que te duelen los ojos, pero no puedes dormir, en los que te pasas la noche pensando, y el problema no es pensar, el problema es pensar en él. Pues si, la cosa es que no tengo mucho más que pensar, y tengo un remolino de sentimientos, cuando me creía un poco inmune a eso de sentir algo por alguien, y aquí estoy presionando mi yugular, entendiendo el porque no me mira, y el porque cuando lo hace, no es de la forma que yo quiero que sea.
Soy un cubo de hielo, pues si él no tiene una mirada para mi, no veo porque yo deba demostrarle alguna clase de afecto… Es entonces cuando llega y me dice “¿Qué haces pequeño?”, se me caen los boxers, me derrito completamente, termino gritando internamente. “Bien ¿y tú?” es lo único que logro responder, porque se me fueron los minutos tratando de buscar algún calificativo, que no sea pequeño, y que sea igualmente poderoso, tarea en la que fallo completamente.
A veces suelto alguno de mis halagos, sobre su nuevo corte de cabello, y que de alguna u otra forma me gusta… Y él sólo logra responder con una pregunta “¿Qué piensas sobre las relaciones entre personas del mismo sexo?”… -MIERDA-, “El amor no considera géneros, uno se enamora o no se enamora así de sencillo, es cuestión de gustos, hay personas que le gustan las mujeres, y a otras los hombres, existen personas que el género es irrelevante, lo importante es como te sientas con esa persona. Lo demás sobra”.
“Mmm”, me dice él. Pues al parecer mi respuesta no lo convenció del todo. Es en ese momento en que me pregunto ¿Por qué coño de la madre, terminan gustándome esa clase de persona?, los que no saben que quieren, los indecisos, los problemáticos. Tengo un grave problema con eso. Pues, no estoy aquí para aparentar gustarte, o buscar la manera más rebuscada existente sólo para causar en ti una buena impresión. Lamentablemente a la final esto es lo que soy, si, un montón de cosas que a la final terminan definiéndome.
Y lamentablemente te gusta mi definición, o no te gusta. Más allá de eso, es difícil que yo pueda hacer algo.
Soy un cubo de hielo, pues si él no tiene una mirada para mi, no veo porque yo deba demostrarle alguna clase de afecto… Es entonces cuando llega y me dice “¿Qué haces pequeño?”, se me caen los boxers, me derrito completamente, termino gritando internamente. “Bien ¿y tú?” es lo único que logro responder, porque se me fueron los minutos tratando de buscar algún calificativo, que no sea pequeño, y que sea igualmente poderoso, tarea en la que fallo completamente.
A veces suelto alguno de mis halagos, sobre su nuevo corte de cabello, y que de alguna u otra forma me gusta… Y él sólo logra responder con una pregunta “¿Qué piensas sobre las relaciones entre personas del mismo sexo?”… -MIERDA-, “El amor no considera géneros, uno se enamora o no se enamora así de sencillo, es cuestión de gustos, hay personas que le gustan las mujeres, y a otras los hombres, existen personas que el género es irrelevante, lo importante es como te sientas con esa persona. Lo demás sobra”.
“Mmm”, me dice él. Pues al parecer mi respuesta no lo convenció del todo. Es en ese momento en que me pregunto ¿Por qué coño de la madre, terminan gustándome esa clase de persona?, los que no saben que quieren, los indecisos, los problemáticos. Tengo un grave problema con eso. Pues, no estoy aquí para aparentar gustarte, o buscar la manera más rebuscada existente sólo para causar en ti una buena impresión. Lamentablemente a la final esto es lo que soy, si, un montón de cosas que a la final terminan definiéndome.
Y lamentablemente te gusta mi definición, o no te gusta. Más allá de eso, es difícil que yo pueda hacer algo.
Omega